Llego a casa después de una extraña tarde de llorar frente al piano. Estoy triste, no hay nada que hacerle. Mientras la melodía llenaba la habitación, yo simplemente lloraba.
Las lágrimas,
Golpeando los bemoles.
Apareció el hueco,
Otra vez.
Lo tomé,
Lo dejé de lado.
Y empecé a estudiar políticas populistas-
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